Cameron Townsend, "tío Cam" para sus amigos, nació en California en una etapa económicamente difícil. Su trasfondo era presbiteriano y en su segundo año de estudios en la Universidad escuchó una conferencia dada por el famoso misionero John R. Mott. Al año siguiente se enroló con la Casa Bíblica de Los Ángeles como colportor para distribuir la Biblia en América Latina.
La misión con la que estaba asociado no daba importancia a la traducción de la Biblia; para ellos lo que debía hacer Cameron era evangelizar y edificar a los creyentes. Pero a estas alturas él ya estaba decidido a consagrar su vida a la tarea de la traducción de la Biblia a las lenguas no alcanzadas. Fue así como, en 1934, él y L. L. Legters fundaron el Campamento Wycliffe que sería el comienzo de la organización misionera protestante e independiente más grande del mundo, Wycliffe Bible Translators y de su filial Summer Institute of Linguistics (SIL). Con el tiempo trabó amistad con el Presidente de Méjico, Lázaro Cárdenas, que estaba entusiasmado con la tarea que los traductores estaban haciendo. Cárdenas solicitó a Cam que enviara más lingüistas para poner por escrito los muchos idiomas indígenas existentes en Méjico. Esto era una puerta abierta desde instancias oficiales que había que aprovechar. Después pasó 17 años en el Perú y luego se mudó a Colombia para seguir la labor de traducción. Su filosofía podría resumirse en esta frase: "El mejor misionero es la Biblia en la lengua materna. Nunca necesita vacaciones y nunca se la considera extranjera." |